permanece ; según algunos, sobrevivirá a todos los dones milagrosos; según otros, permanecerá para siempre: la fe en el sentido de confianza en Dios y en Cristo; y la esperanza, como la gozosa espera de una eternidad de bienaventuranza siempre creciente.

La mayor de ellas es la caridad ; no sólo en sí mismo, sino porque es la raíz y fundamento de los otros dos. Las cosas que son solo temporales nunca deben despertar nuestro más profundo interés o ser nuestra principal preocupación. Nada debe hacer esto que no durará para siempre.

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Antiguo Testamento