Porque decidí no saber nada, etc.— La palabra traducida para conocer, se usa según el idioma hebreo, hacer saber, o enseñar. San Pablo, quien era un hombre erudito, especialmente en el conocimiento judío, habiéndoles dicho en el capítulo anterior que ni el saber judío ni las ciencias griegas dan a un hombre ninguna ventaja, como maestro inspirado y ministro del Evangelio, aquí les recuerda que él no mostró ni usó ninguno de ellos cuando plantó el Evangelio entre ellos; insinuando así que esas no eran las cosas por las que sus maestros debían ser valorados o seguidos. Parece haber un énfasis peculiar en la expresión entreusted, como si el Apóstol hubiera dicho: "No cambié mi método habitual en Corinto; y usted sabe con qué glorioso éxito fue asistido". El griego de la última cláusula es, και τουτον εσταυρωμενον, - incluso esa persona crucificada. Los judíos y los paganos evidentemente le dieron a nuestro Señor este nombre en forma de desprecio; pero St.

Pablo declara que en lugar de ocultar esto como una infamia y un escándalo, fue en lo principal en lo que insistió; como de hecho todas las doctrinas más importantes del Evangelio están en una conexión cercana y natural con él: y sin duda, él las tomó en esa conexión; porque él se refiere, en el curso de estas epístolas, a varias doctrinas relacionadas con el Padre y el Espíritu Santo, como lo que él les había enseñado, aunque no incluidas expresamente en la doctrina de la crucifixión. Ver Locke, Doddridge y Mackni

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